Un primer grupo de jóvenes que forman parte del proyecto educativo “Agua y Arcilla: forjando historia”, participaron en el horneado de las primeras piezas de cerámica elaboradas por ellos mismos, luego de tres meses de trabajo y talleres dirigidos por el destacado escultor cajamarquino Teófilo Huaccha.
Este primer grupo forma parte de los 300 jóvenes de entre 13 y 17 años que se benefician con este importante proyecto educativo de Yanacocha cuyo objetivo es que jóvenes de 20 barrios urbanos de Cajamarca valoren la importancia del agua y cómo esta, mezclada con la arcilla, puede reflejar la imaginación y la creatividad de los estudiantes.
Después de noventa días de arduo trabajo, los jóvenes, cerámica en mano, expresaron su alegría al ver sus obras de arte terminadas. “He visto trabajos espectaculares de jóvenes en solo tres meses. Como Yanacocha, seguiremos trabajando con los barrios e instituciones y reforzar así dos de nuestros principales ejes de inversión: agua y educación”, indicó Andrés Oliveros Castillo, gerente de Relaciones Institucionales de Yanacocha.
Esta experiencia generó también que algunos padres de familia se sumaran a los trabajos de moldeado en arcilla. Luis Reyna del barrio San Sebastián, Sheyla Longa de El Estanco, y Sonia Pérez de Cashapampa, participaron directamente del programa e indicaron que es importante trabajar con los niños. “Estas actividades podrían constituir un buen oficio ante la falta de trabajo”, indicaron.
Teófilo Huaccha, maestro e instructor, quedó conforme con el rendimiento de los participantes. “El interés que han mostrado para la cerámica facilita el proceso de enseñanza y el compartir conocimientos, pienso que son un buen grupo y tienen mucho interés en promover la artesanía”, manifestó.
Yanacocha prioriza su inversión social en tres ejes fundamentales: el agua, la agricultura y educación. Esta es una forma de unir agua y educación, inculcando en los jóvenes compromiso con el medio ambiente y con un arte ancestral del Perú, como la cerámica.