La educación escolar es muy importante y, por ello, distintas organizaciones, tanto públicas como privadas, buscan mejorarla invirtiendo en recursos materiales y capital humano. ¿Y qué sucede con la educación preescolar? Ciertamente, es un asunto que en nuestro país recién va adquiriendo la dimensión que merece. En tal sentido, Sociedad Minera Cerro Verde merece un reconocimiento especial, por su iniciativa de apoyar dicha etapa formativa, donde los pequeños desarrollan gran parte de su potencial y habilidades para aprender.

Cerro Verde ha diseñado una cantidad considerable de material de prelectura, preescritura y precálculo, para niños de tres a cinco años, así como 17 juegos educativos, orientados a mejorar sus capacidades diferenciadas. Asimismo, ha donando 388 juegos didácticos a las instituciones y programas no escolarizados de educación inicial y a las salas de estimulación temprana de los distritos Uchumayo, Yarabamba y Tiabaya, en Arequipa, y a las del puerto Matarani.

Como detalle adicional, cabe señalar, que la mayoría de los recursos pedagógicos fue elaborada en pino blanco, un tipo de madera reciclada procedente de la mina. Además, la empresa empleó mano de obra local para fabricarlos, promoviendo con ello, puestos de trabajo en sus zonas de influencia.