Gracias a este programa, implementado desde el 2004, los pobladores beneficiados pueden generar un ingreso de hasta 500 nuevos soles. Para ello Antamina trabajó con la Asociación Cultural para el Desarrollo Participativo (ACUDIP) para que capacitara a los pobladores en la crianza tecnificada de cuyes, incidiendo en su autoestima y liderazgo.

Hoy en día, los 12 mil cuyes son los preferidos de la región debido a su rica carne y buen peso – entre los 800 y 900 gramos –, por algo los llaman cuyes parrilleros. “Hemos formado una asociación entre los productores de todo el Valle Fortaleza (Ancash) para fortalecer la venta nuestros cuyes”, sostiene Roger con visión estratégica.

Y ALGO MÁS

Pero el programa no termina en el consumo del cuy a la parrilla. Gracias a la gran cantidad de materia orgánica producida por el cuy, Antamina apostó por la construcción de un biodigestor en la comunidad de Huaquish con el objetivo de generar gas y fertilizantes.

El biodigestor, que se encarga de descomponer y transformar todo tipo de materia orgánica, ya lleva cuatro años funcionando. Con la producción semanal de gas metano, 450 m3, la comunidad ahorra S/. 180, mientras que por 2,5 toneladas métricas de fertilizantes orgánico sólido el ahorro equivale a S/. 600.

La inversión de Antamina es valiosa, porque contribuye con la comunidad y porque la comunidad comienza a andar sola.

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